Como empleador, que a menudo participa en paneles de entrevistas para entrevistas telefónicas, le sugeriría encarecidamente que las tomara tan en serio como una reunión cara a cara, si no más.
Una entrevista telefónica es mucho más difícil que una cara a cara; si algún candidato se reúne cara a cara tendrá que trabajar muy duro para construir la misma relación con el panel de entrevistas.
Para maximizar sus posibilidades de éxito, le sugeriría que minimizara los riesgos.
Aunque es posible que salga del trabajo a la hora de la comida para una entrevista física, siendo realistas, se tomaría la tarde libre (por lo menos) para prepararse y concentrarse.
Del mismo modo, podría programar una entrevista física fuera de horario, y vale la pena preguntar, pero en la práctica, si un panel está involucrado, esto podría ser un reto.
Tratar de encontrar un lugar tranquilo y usar el teléfono móvil también es un problema; he perdido la cuenta de las entrevistas que hemos terminado debido a la mala recepción, a problemas de ruido de fondo, o (más comúnmente) a que el teléfono de los solicitantes se ha quedado pinchado. Crea una mala impresión de la que es muy difícil recuperarse.
Por lo tanto, le aconsejo encarecidamente que se tome el tiempo libre, esté preparado y llame desde su casa a un teléfono fijo, ya que es la estrategia más libre de riesgos.
Además, le diría que si puede usar Skype, entonces hágalo, ya que el impacto de poder verse es significativo. Sin embargo, asegúrese de vestirse para la entrevista y tener un teléfono fijo y el número de contacto a mano en caso de llamadas perdidas.