1 - Sé honesto.
No hagas una suposición a menos que seas capaz de hacer una suposición educada. Si puedes calificar a un educado con una suposición con el por qué crees que podrías tener razón, entonces explícalo y ve por un crédito parcial. Por ejemplo, en mi curriculum vitae de los protocolos donde tengo suficiente experiencia para ser considerado un experto. No tengo memorizados todos los elementos de cada protocolo, pero si me hace una pregunta, puedo hacer una suposición fundamentada sobre cuál podría ser la respuesta, porque conozco lo suficiente los antecedentes como para poder descartar algunas opciones. Puedo mostrar mi experiencia en la materia explicando por qué hago esta suposición.
Pero si has llegado al punto de no tener ni idea, admítelo.
2 - Tener una idea de dónde encontrarías la respuesta
Es fácil ser sorprendido incluso cuando se preguntan hechos simples durante un caso de nerviosismo del entrevistador. Califica tu falta de conocimiento con una idea de lo que harías para encontrar la respuesta si esto surgiera mientras estás en el trabajo.
3 - El contexto importa
Los entrevistadores pueden hacerte preguntas basadas en tu currículum. Si te quedas perplejo por un término que se considera un conocimiento estándar para alguien con las calificaciones de tu currículum, entonces esto se verá bastante mal. Sucede que, a veces, el alcance de una tecnología determinada es lo suficientemente amplio como para que puedas trabajar en ella a fondo y, sin embargo, se pierdan algunos términos bastante básicos. Prepárate para eso con un conocimiento de trabajo más amplio de cualquier palabra de éxito que enumeres en tu currículum.
Simultáneamente, el entrevistador puede hacer la primera pregunta que le venga a la cabeza que esté vagamente relacionada con tu posible puesto. Yo he hecho esto, particularmente cuando un tema persistente surgió en el equipo, y todos nos quedamos perplejos. No saber la respuesta en estos casos no te hace peor que la mayoría de la gente, pero puedes distinguirte por tener un plan de acción razonable para aprender lo que no sabes. Después de todo, en la mayoría de los puestos de ingeniería es de conocimiento común que todo el mundo aprenderá cosas nuevas todo el tiempo.
4 - No dejes que te tire
El peor de los casos es estar tan tirado por la falta de respuesta que te tropiezas con el resto de la entrevista. Toma un respiro, déjalo atrás. Le pasa a todo el mundo.